“Antonino pasea contento por el bosque cuando descubre a Oso, que ha caído en una trampa de cazadores. Sólo tiene cinco minutos para llevarlo al hospital. ¿Será capaz de llegar a tiempo? Un libro sobre la responsabilidad medioambiental y la amistad.” (Ruta 8: La comunicación a través del personaje, pág. 139)
En un principio, cuando nos encontramos por primera vez con este personaje de grandes bigotes, sonriente, bajito y bonachón, no acabamos de entender qué ven en él los niños. Pero cuando nos adentramos con Antonino en el bosque y descubrimos a oso, no podemos evitar sentirnos también responsables y querer acompañarle en esa carrera trepidante para salvarle.
Después de esta aventura, Antonino y Oso se harán amigos inseparables. Y en los siguientes libros de la serie “Antonino va y viene” y “Antonino de sueño en sueño” asistiremos a esos pequeños roces de la convivencia, aprenderemos a ponernos en el lugar del otro, entenderemos qué significa cuidar a alguien, pero también dejarse cuidar. Sobre todo podremos hablar de lo que significa ser responsables respecto al mundo y los seres que nos rodean.
Si además buceamos en nuestras Rutas de lectura y tiramos del hilo, encontraremos un montón de propuestas para investigar sobre el medioambiente o para explorar conceptos matemáticos.
Seguro que a esas alturas ya compartiremos el entusiasmo de los niños por estos dos personajes. Para entonces, Antonino se habrá convertido en nuestro Antonino, nuestro héroe.
«¡Antonino!
¡Antoninoooooo!
¡AN – TO – NI – NOOOO!»
Llamadlo bien fuerte, que Antonino nunca falla.